Pensión de animales, se lee a la velocidad de un viaje en
montaña rusa. La novela aspira a noquear al lector por la intensidad de lo que cuenta y por lo inhabitual de lo que elige contar. Todo ocurre en pocos minutos, cuando una muchacha desquiciada, Laura, da un portazo y baja furiosa las escaleras, insultando y pateando las puertas de un inquilinato de pensión . Esta bajada frenética, de donde varias historias se desarrollan sin dar está des-tinada a precipitar los hechos en una suerte de acontecimiento definitivo e inaugural.
- info@paraleertemejor.com
Valoraciones
No hay valoraciones aún.